Numerosos estudios demuestran el sostenido efecto antibacteriano y antiinflamatorio del fluoruro de estaño avalando se capacidad de acción frente a la gingivitis.
A los antibióticos también se les conoce como medicamentos antibacterianos y se utilizan para tratar infecciones, como la escarlatina o la neumonía, causadas por bacterias.
Igualmente su poder antibacteriano resulta eficaz al prevenir numerosos problemas intestinales que se producen por alteraciones de la flora intestinal.